El custodio del hijo de Julio López fue asesinado en su casa Merlo. El hombre era un cabo primero de la Policía Federal identificado como Ariel Acuña.
Acuña formaba parte del equipo encargado de custodiar a Rubén López, hijo del testigo desaparecido. Cabe destacar que los primeros reportes aseguran que su muerte no tiene nada que ver con la desaparición del albañil.
Rubén dijo en declaraciones radiales que la muerte de Acuña estaría relacionada con su círculo íntimo. El hombre apareció muerto en su domicilio con un disparo en la cabeza.
Julio López desapareció por segunda vez el 18 de septiembre de 2006, en la ciudad de La Plata. Era querellante y testigo clave en juicios contra militares por crímenes de lesa humanidad, entre los que se encuentra Miguel Etchecolatz, condenado a cadena perpetua en una cárcel común.
López había sido secuestrado por primera vez desde octubre de 1976 hasta junio de 1979, durante la más oscura dictadura militar argentina. Actualmente su paradero es desconocido.
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