Zaffaroni atrincherado.

Zaffaroni: “No pienso renunciar”

En medio de las repercusiones por los departamentos alquilados para fines ilícitos, el ministro de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni, negó en una entrevista con el periodista Víctor Hugo Morales, que se haya reunido con ministros del Gobierno como el secretario Legal y Técnico Carlos Zannini, o el ministro de Justicia, Julio Alak.

“No he estado en la casa de Gobierno”, dijo el juez desmintiendo algunas informaciones periodísticas publicadas en el diario La Nación en el día de hoy, donde se mencionaba un supuesto apoyo del gobierno de Cristina Kirchner.

El juez dijo con respecto a las propiedades, que heredó terrenos y que los ha cambiado por departamentos en un negocio inmobiliario. Añadió que ni siquiera sabe cuál es la dirección de algunos.

“Soy víctima de una desnaturalización del contrato. He pedido que me devuelvan los inmuebles”, reveló al tiempo que manifestó que no puede poner al frente a la inmobiliaria porque necesita negociar la salida de estas personas de sus propiedades.

“Vivo lejos de los departamentos, ni paso por esos lugares”, confesó y agregó: “Yo no pretendo que la gente crea que soy honesto, que si sabía o no sabía. Lo que realmente me asombra es que alguien crea que después de 40 años como criminólogo, quiera montar un negocio de esta naturaleza. Sería muy tonto”.

Zaffaroni dijo que los alquileres rondan en 1.500 a 2.000 pesos, negando lo que se había publicado antes en algunos medios, donde se decía que los mismos llegaban a 10.000.

Morales le preguntó sobre cuál cree él, que es la razón de todo esto: “Creo que se debe a que el poder no es algo que uno tiene sino que es algo que otro le atribuye. Creo que se me atribuye un poder que no tengo, de ahí yo resulto blanco de esto, que es una modalidad que no es novedosa. La modalidad Berlusconi. Es una técnica que cuando se instale en la política argentina puede ser muy peligroso. El problema que tiene esto es una destrucción de la democracia”.

Además dijo que el periodismo tiene una implicancia política enorme en este sentido.

“Yo no tengo nada que ocultar ni en mi vida pasada o presente. Me siento muy incómodo que esto repercuta en medio de una campaña electoral, cuando tengo respeto por todos los candidatos”, agregó el juez.

Sobre los pedidos de explicaciones en el Congreso, dijo: “No tengo ningún inconveniente en dar las explicaciones que sean en la Cámara de Diputados”. Aunque resaltó: ”Me duele estar en medio de un escándalo político de esta naturaleza”.

El ministro de la Corte dijo finalmente que tiene claro que “el objetivo que tiene esta campaña es que renuncie a mi puesto. No pienso renunciar”, aseguró.