En Argentina somos felices; lo que pasa es que no se nota.

Los años felices de Cristina

Eramos tan felices y no nos habíamos dado cuenta. Según la Presidente el proyecto nacional y popular que ella representa ha conseguido devolver la dignidad y la armonía al país, lejos están las penurias que en otros tiempos aquejaban a una Argentina desmembrada y al borde del suicidio. Un grave problema existencial que marcó el rumbo de la nación, antes de la llegada del iluminado a la Casa Rosada, él, Néstor primero quien con su varita mágica puso en marcha una nueva Argentina, a partir de un modelo, que ella pretende energizar con valentía y esfuerzo sobrehumano, aun cuando su cansancio físico y emocional se encuentre al borde del límite, no se dejará doblegar. Por menos es lo que estima instalar dentro de un confucionismo generalizado.

El éxito como leit motiv de un argumentado misterio de continuidad ó discontinuidad apela junto a el dramatismo cinematográfico de la Señora vestida de negro, a un efecto de compungido acompañamiento de una parte de la sociedad adicta a necrofilia y es reforzado con subliminales alocuciones que inspiran sustancialmente a sumergir a todos y a todas en un interminable duelo, especulando con que el muerto ocupe un lugar privilegiado como si estaría vivo entre todos… vigilante y obsecuente con las decisiones de Ella. Como si El, no Ella fuera el mentor de la gestión que avanza profundizando la intervención estatal.

En estos días, los ciudadanos españoles movilizados, y agrupados en distintas plazas sobretodo en la Puerta del Sol de Madrid, irrumpieron con cacerolazos y batucadas, sonidos que se encuentran a la orden del día, unidos a la protesta, las pancartas y las asambleas hacen recordar aquel diciembre de 2001 en Argentina, cuando el ¡Que se vayan todos ! resonaba por doquier junto al redoblar de las cacerolas. La crispación generalizada se agudizó.sin embargo después de los sucesos que llevaron a la violencia y que todos conocen. Los políticos siguen siendo los mismos, nada cambió. Solo se arraigó la costumbre de la protesta callejera.

Desde esos días las callecitas de Buenos Aires ostentan el caos y los piquetes tornan insoportable la vida cotidiana de los porteños y lo mismo ocurre en el conurbano bonaerense, mientras las autoridades, nacionales y provinciales miran para el costado y no resuelven los problemas.

Entre tanta anarquía injustificada la Presidente- comentó -”Cuando uno ve imágenes de lo que sucede en otras partes del mundo, hoy por la mañana antes de venir escuchaba el reportaje que le hacían a un joven español a raíz de esas grandes manifestaciones populares de jóvenes que curiosamente -jóvenes en la vieja Europa y de los países del África también- estaban reclamando un lugar y un espacio, uno siente entonces que hay un mundo que está cambiando, que hay un mundo que reclama inclusión social, que reclama objetivos, porque yo creo que lo que están pidiendo esos jóvenes es tener esperanzas y construcción de futuro, que es lo que nosotros hemos hecho y estamos haciendo en estos años felices.”

Con esta expresión poco feliz y fuera de lugar, la Señora nuevamente intento burlase de la ciudadania, tal como lo viene haciendo durante estos ocho años de régimen autocrático del kirchnerato autentico antes compartido con Él… pero en mayor medida puso el acento en la felicidad. Una felicidad que no se encuentra ni con lupa, en un país azotado por la delincuencia, un narcotráfico que ha crecido exponencialmente desde que Él transpuso las puertas de la Casa Rosada seguido por Ella, manchado por una educación cuyo nivel ha caído abrumadora y vergonzosamente, aunque se destine mas del 6 % del presupuesto en ese ministerio y se entreguen netbook al alumnado, resulta lamentable comprobar que a nivel secundario los estudiantes “no entienden lo que leen, por citar una de las falencias del sistema. Esta parece ser la juventud militante que acompaña a Cristina en sus armados actos de campaña, “una legión de analfabetos funcionales” que no puede interpretar ni siquiera los discursos de la Presidente que tanto festejan.

Esta felicidad supuestamente se extiende a los que gozan de alguno de los planes no trabajar que ofrece el abanico político kirchnerista para asegurarse el voto, así como las asignaciones por hijo y a las embarazadas que cumplen el mismo objetivo, total la plata es de los jubilados. Tanto los fondos del ANSES como del PAMI dan para todo. Trabajar para que te cansas… que ganas…

Mientras los felices jubilados saltan de alegría porque cobran $ 1227( USD$ 300, ) mensuales y el Estado benefactor administra los fondos expropiados a las AFJP invirtiéndolos en subsidios y canjeándolos por hermosos papelitos de colores llamados bonos. Cuantas cosas se han podido hacer con los ahorros de los adultos mayores, lástima que estos no alcanzaron para el pago del 82% que vetó la Señora. Bueno, tendrán que comprender que como dice la Jefe de Estado hay que ser solidarios con los demás, tantos fueron los aumentos recibidos hasta la fecha por los queridos abuelos, que se pueden dar lujo de repartir lo acumulado durante toda la vida.

Cuanta felicidad, las de las amas casa comparando los precios del supermercado con los que presenta INDEC, los del super están primero en tabla de valores multiplicados por tres o cuatro es evidente que como dice Cristina estamos transitando por el camino correcto, “el de la inflación “, ese que mantendrá delgados los bolsillos, sin necesidad de consultar nutricionista alguno.

Una exultante felicidad conmueve a los argentinos, la Presidente ha informado” que estamos en el camino correcto porque hemos empezado la tarea de integración para lograr una Argentina Federal.”¿ Una Argentina Federal con un gobierno unitario? una extraña conjunción que pretende ocultar las intenciones perversas de acumulación de poder perpetuo.

Como si esta felicidad acumulada fuera poca, desesperadamete pretenden extender el proyecto nacional y popular a la Ciudad Autónoma, para conformar junto con la Provincia de Buenos Aires y Nación un sólo corazón. Un triunvirato de poder, hecho a medida para instalar definitivamente la propuesta exhibida por el viceministro de Economía de la Nación, Roberto Feletti, profundizar la intervención estatal en el sector privado y considerar que “el populismo debe radicalizarse”.

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* En una entrevista publicada por la revista Debate, a principios de este mes, el ministro Feletti consideró que se debería avanzar en la consolidación del populismo porque “uno de sus principales problemas, se debían a que no era sustentable, ya que no podía apropiarse de factores de renta importantes” y señaló que “esto es lo que cambió”.

“Un proceso de estas características necesariamente debería profundizarse. Ganada la batalla cultural contra los medios, y con un posible triunfo electoral en ciernes, no tenés límites”, resaltó el viceministro de Economía.*

* Revista Debate

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Esa es la felicidad que se conseguirá votando la trilogía Scioli -.Kirchner -.Filmus y demás candidatos diseminados en las provincias.

Autor: Susana Sechi
Directora de La Historia Paralela