Escándalo y corrupción en la monarquía española.

Iñaki Urdangarín, duque de Palma y esposo de la infanta Cristina, se encuentra en la mira de una serie de hechos de corrupción, con lo cual se ha decidido apartarlo de sus funciones públicas, según informó el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottrono.

El asunto gira en torno a unos supuestos desvíos de fondos recibidos del gobierno de las islas Baleares, por 2,3 millones de euros, y del ayuntamiento de Valencia, por 3,7 millones, en favor del Instituto Noós, presidido por el duque entre 2004 y 2006.

Urdangarín se habría beneficiado con el cobro de sobreprecios al Estado, a partir de una serie de congresos sobre “ciudad y deportes”, que le habrían dejado una rentabilidad del 170% sobre los costos de los eventos.

Ahora el duque deberá comparecer ante la justicia a comienzos del próximo mes y aunque al parecer la raíz de los escándalos es su actividad privada, los mismos han salpicado a la realeza.

En este contexto, Urdangarín está haciendo lo posible por despegar a la familia real de este asunto. El fin de semana envió un comunicado a la prensa asegurando que “lamenta profundamente todos los comentarios que se han generado en los medios” y que la Casa Real “no tiene nada que ver con sus actividades privadas”.

El ex jugador de balonmano profesional, se convirtió en duque cuando contrajo matrimonio con la infanta Cristina el 4 de octubre de 1997. Ambos tuvieron cuatro hijos: Juan Valentín, Pablo Nicolás, Miguel e Irene.